Como parte de las actividades del Centro Islámico Amir al-Muminin, ubicado en la Ciudad de México y en conmemoración del triste suceso acaecido en Karbalá, Irak, el décimo día del mes de Muharram del año 680 del calendario musulmán, en el cual fue asesinado el Imam Hussein ibn Ali (P), el segundo nieto del Profeta del Islam, e hijo de Fátima az-Zahra (P); la comunidad musulmana en la capital mexicana tuvo a bien realizar actividades en saludo a la causa del Imam Hussein (P), así como algunas elegias por su martirio. Durante los diez primeros días de Muharram se realizaron diariamente sesiones de duelo en la sede del Centro Islámico, con las respectivas medidas recomendadas por el Gobierno del país en vísperas de la tercera ola de Covid-19 que nos azota.
Las conmemoraciones culminaron con la realización de la tradicional Marcha Anual de Ashura organizada por 4° vez consecutiva por el Centro Islámico en la capital mexicana, en la cual se dieron cita miembros de la comunidad musulmana mexicana, afgana, pakistaní, iraní y árabe; acompañados de la prensa mexicana. Durante la marcha se entregaron folletos informativos sobre el islam y el mensaje de Ashura así como el obsequio de botellas de agua y refrigerios a transeúntes. El contingente de la marcha avanzo desde la Alameda Central de la capital hasta el icónico monumento a la Revolución mexicana, donde se enfatizó la importancia de preservar los símbolos hussainíes e islámicos a pesar de las dificultades, ataques y desinformación que en algunas sociedades y lugares se difunden en su contra; en el mismo discurso se agradeció la participación de los asistentes y se invitó a ser verdaderos seguidores de la noble familia profética en ética y hechos; se concluyó con una oración colectiva y la recitación de la Ziyarah de Ashura.
La comunidad musulmana shi’a de México y el Centro islámico Amir al-Muminin, aprovechamos la ocasión para expresar nuestras condolencias a la Comunidad islámica y a toda la humanidad por el aniversario luctuoso del martirio de uno de sus más grandes santos, el Imam Hussein (P), Dios quiera que nuestros corazones estén abiertos a su persona y a ser pacientes ante las dificultades que hoy día nos embargan en el mundo.